Necesito el sol brillando
y el azul del mar,
necesito las gaviotas
en vuelo lento, quedas,
con la elegancia colgada de sus alas
y sus ojos agudos encontrando su lugar.
Necesito que el Sol haga
un precioso atardecer
y todo el tiempo, un instante, deje de Ser.
Necesito tus palabras
y ese aroma jugueteando en tu piel.
Necesito que el silencio
se cobije bajo mi pensamiento
y me ayude a comprender el Ser.
Necesito tantas cosas... ¿Qué puedo hacer?
Tengo el corazón herido y mi sonrisa perdida,
mis manos vacías, mis pies cansados...
¡Pero el Azul me queda! ¡Puedo respirar!