“Creo poder afirmar que fue en Cádiz,
cabalmente en los momentos de la guerra
de la Independencia, cuando surgió el sentimiento
de la nacionalidad, de la patria.” Ramón Solís
Ramón
Solís decidió escribir una novela de la época de las Cortes. Así
surgió su libro El Cádiz de la Cortes, que Marañón, su
prologuista, consideró como uno de los libros más importantes
sobre España; que ha puesto luz severa, vida humana sobre el
gran episodio que Cádiz vivió con una enorme intensidad. Gracias
a él sabemos lo que pasó en Cádiz y lo que realmente realizaron,
vivieron y soñaron aquellos liberales españoles. Claro está que
Ramón Solís no se ha ocupado sólo de los doceañistas eminentes y
todavía sonoros, sino del pueblo y los estamentos de aquella
época, haciendo junto a la historia, esa intrahistoria que nos
interesa tanto.
“El Cádiz de las Cortes –nos dice Ramón Solís- fue mi tesis
doctoral en la Facultad de Ciencias Políticas y Económicas de
Madrid. Esto quiere decir que este libro surgió de un propósito
más erudito que literario y que estaba dirigido a un público de
especialistas y estudiosos”. El Cádiz de las Cortes que obtuvo
el premio Fastenrath de la Real Academia Española de 1960,
pertenece por su estilo al gran ensayismo español.
Ramón Solís Llorente nace en Cádiz el 1 de marzo de 1923. Inicia
sus estudios elementales en el Colegio del Pilar de Madrid. Y
continúa sus estudios en el Colegio San Felipe Neri de Cádiz. En
1944 abandona sus estudios de marino e inicia los de ingeniero
de Montes, que, más tarde, simultánea con los de Ciencias
Políticas y Económicas. En 1949 termina la carrera de Ciencias
Políticas y Económicas y es nombrado corresponsal en Madrid del
semanario La Voz del Sur. En 1953 contrae matrimonio en Cádiz
con Rosario Jiménez Alfaro. Un año más tarde publica su primera
novela La bella sirena. En 1956 presenta su novela Los que no
tienen paz al premio Planeta y queda finalista. Esta novela ha
sido llevada al teatro por José María Pemán con el título Los
monos chillan al amanecer. Sus cualidades de historiador se
revelan en El Cádiz de las Cortes. Es elegido miembro de la Real
Academia de la Historia. En 1961 es elegido concejal del
Ayuntamiento de Cádiz . Al año siguiente regresa a Madrid.
Publica más novelas, Ajena crece la hierba, Un siglo llama a la
puerta, El canto de la gallina, El alijo, La eliminatoria, El
dueño del miedo, Mónica, corazón dormido. Publica también
algunos ensayos, Coros y Chirigotas, La guerra de la
Independencia Española. En 1968 es nombrado director de la
revista La Estafeta Literaria y en 1970 obtiene el Premio
Nacional de Literatura “Miguel de Cervantes”.
Lo social, lo psicológico y el ambiente de Cádiz y sus tierras
son las características persistentes al correr de su intensa e
interesante obra. El crítico Melchor Fernández Almagro veía en
Un siglo llama a la puerta “una novela de excelente calidad.
Está muy bien compuesto el ambiente histórico y presenta con
exactitud el problema del choque de dos generaciones”.
“Lo genial es decir muchas cosas –escribe Solís- y decirlas
perfectamente. Ahora bien: esto se logra a través de las ideas.
Cuando la idea se piensa con claridad, se escribe con soltura;
y, cuando esto se logra, se ha alcanzado el estilo”. Estamos de
acuerdo con estas dos ideas que pone Solís en la mente de unos
de sus personajes, y, fiel a ellas, el escritor gaditano
interesa y logra excelentes éxitos.
Y también fue fiel, a aquel viento generoso que sopló sobre su
ciudad natal en el siglo XVIII, y que forjó el espíritu dilecto,
universal y políglota de la vida gaditana.