Resulta que EU toma medidas que pueden llamarse regulacionistas
para paliar la crisis financiera y que, medio en broma, han sido
calificadas como socialistas. Lo cierto es que el Estado
capitalista del país más poderoso del planeta, EU, ha
intervenido donde la ortodoxia lo prohíbe: el mercado (del
dinero).
Mientras tanto, al otro lado del mapa, Rusia, profundamente
arrepentida de alguna vez haberse llamado soviética, no sabe
cómo hacer para volverse capitalista, le sobra el dinero si de
promover inversiones se trata.
¿Cuál es la lección? Que un país no puede aspirar al socialismo
sin antes pasar por el capitalismo; y que un país no puede pasar
por el capitalismo sin al mismo tiempo marchar al socialismo.
O, lo que es lo mismo, cada país se define por su contrario: si
es capitalista, va al socialismo; si se hace llamar socialista y
no ha pasado por el capitalismo, debe retroceder y pagar esa
deuda.