LA PRIMAVERA


Los ríos corren velozmente al mar,
y pronto querrán llegar.
Les empuja el deshielo,
llenándoles el caudal.
Las sierras tristes se quedan,
desprendiéndose de sus mantas
porque el río se las lleva.

Los árboles florecen,
y en las noches estrelladas
al compás cantan,
pidiéndoles a la luna
que les hechice con la luz de plata.

Los jardines dormidos se alzan
para que puedan germinar
todas sus ramas.
El sol juega con ellas,
dándole color a los vestidos
que puestos llevan.

En abril las nubes
de sus aguas se descargan,
y así darán de comer a las flores
de la luna enamorada.

Los campos se llenan de frescor y color
y los girasoles se van detrás de sol.
Vueltas y más vueltas dan, para así
al sol poder mirar.
La luz que hay en la primavera
no hay en otra estación.
Por eso hay que vivirla y disfrutarla
con pasión.

Después del frío invernal
llega el entretiempo
para empezar a dar calor
en todo el Universo.
En la alborada los pájaros cantan,
dando de comer a sus polluelos,
para que pronto salgan de sus casas.

El anhelo nace en la primavera,
cuando llega el amor que todos esperan,
y si no llega en la primavera,
no tardará porque el amor no puede faltar.

En la primavera, se ama
En la primavera, se vive
En la primavera, se disfruta
En la primavera…