- POESÍA 1
-
PALABRAS PARA ACALLAR AURORAS
(a mi amor de siempre)
Tengo que decirte, amor,
que he seguido floreciendo entre cansancios
y lluvias que venían amamantando auroras
desde el lado opaco del recuerdo.
Que apenas pude acallar tus labios
con mis dolores antiguos de viejo caminante sin báculo
y con sorpresas, que te sentí siempre
desde el silencio de las noches grises,
que te he soñado con ansias incrédulas
más allá del celofán gozoso de tus promesas.
Tengo que decirte, amiga,
que sigo abriendo baúles
como si fueran del primer amor callado,
que cada noche te aguardo y te encuentro
debajo de mis insomnios de viejo lobo
de las estepas sucias, que en cada golpe
de estribor del viento sin rumbo
tu quilla me lame con olas rudas.
Que temo al día
y a las madrugadas
secas,
que cuando sudo
con cuerpos que no son míos
más que para sanar dolores
mis miedos se escarchan todos
en tu regazo.
Que soy pequeño y desvalido
sin tu sonrisa.
Que apenas valgo centavos
sin tu fuerza de madre-hembra.
Que acallar auroras
es imprescindible para mis sueños...
Tengo que decirte, mujer.
BAILANDO CON SOMBRAS
Azogues de paisano
van buscando el pozo de las sombras.
Ha llegado la hora de las máscaras
vestidas de penumbras asesinas:
asolarán
los ecos
de las flores
sin otoños.
Vendrán de puntillas y encorvadas
raptando miserias encubiertas
perfumadas de sangres y de rosas.
Dirán:
eh aquí la voz del escorpión
que se esconde debajo de los besos
azules del futuro...
Y verás que nadie se retuerce
después del aguijón envenenado:
las sombras bailarán bailes
con cascabeles en los ojos ateridos.
PEINADOR DE VIENTOS
(a Chillida, en su muerte)
Peinando el aire con tus hierros
enunciaste espacios infinitos,
ikastolas de lenguas imposibles,
versolaris estáticos del agua.
Te has ido con la palabra y la paz
encerrado en cubos sin aristas,
abierto a la muerte y a los odios
de tu pueblo dolorido y desangrado.
Te has ido con Celaya y con Otero
a seguir descubriendo puertas
por donde hacer pasar los vientos euskaldunes
sin pistolas y sin sangres:
con ese lenguaje de manos y de piedras,
-de hierros abocados al Cantábrico-
que peinan espumas rezumadas
más allá del ínfimo secuestro
de vidas y de ideas.
Peinando aires,
abriendo muros,
soltando amarras,
rompiendo miedos,
Eduardo.
P
e
vientos
n
a
n
eduardo
o
Eduardo Chillida, importantísimo escultor vasco, murió el 22-8-2002 en Euskadi, su tierra, dejando una obra escultórica impresionante y de conjuros abstractos, y su compromiso de siempre
por la paz y contra la violencia fanática de parte de su pueblo.
Ikastolas- Escuelas de educación en lengua euskera.
Versolaris- Una de las tradiciones del país vasco que consiste en inventar y decir poemas, habitualmente rimados, sobre la marcha.
Gabriel Celaya y Blas de Otero- Dos excelsos poetas vascos.