Fibromialgia
La Fibromialgia (FM) es una enfermedad reumatológica idiopática de causas desconocidas cuyo síntoma más acusado es un dolor generalizado que se localiza principalmente en zonas musculares, tendinosas,
articulares y viscerales. Es conocida también como Fibromiositis, Polientesopatía o Síndrome Poliálgico
Idiopático Difuso (que sería el menos erróneo, toda vez que los demás nombres hacen mención a una fibrosis
que no existe).
Hay que especificar que las mujeres que padecían Fibromialgia, hasta hace no muchos años, eran consideradas hipocondríacas y víctimas de un cierto rechazo por parte de médicos que no reconocían su patología ni
sabían cómo clasificarlas. Afortunadamente, desde la declaración de Copenhague de agosto 1992, la Fibromialgia es una enfermedad reconocida por la O.M.S y todas las organizaciones internacionales. Está
clasificada con el cód. M 79.7 en la Clasificación Internacional de Enfermedades, (CIE-10CM en su última revisión), como una enfermedad Reumatológica.
La Fibromialgia puede coexistir con la enfermedad neurológica conocida como Síndrome de Fatiga Crónica, pero es relativamente bajo el número de afectados de Fibromialgia que padecen SFC (8 %), siendo mucho más
alto el de pacientes con SFC que sufren FM (sobre el 80 %).
Hay que decir que la Fibromialgia, a diferencia de la Polimialgia Reumática (con la que guarda similitud en la sintomatología y sólo se da en personas con edades por encima de los 50 años), afecta principalmente
a mujeres de entre 20 a 40 años, y en una proporción de 9 mujeres por cada hombre. Por encima o por debajo de estas edades, suelen darse muy pocos casos.
Los signos clínicos se caracterizan fundamentalmente por dolor persistente y rigidez de intensidad variable de los músculos, tendones y tejidos blandos circundantes, fatiga extrema, trastornos del sueño, malestar
abdominal, entumecimiento y hormigueo, desequilibrios y mareos y un amplio rango de otros síntomas psicológicos, como rigidez matutina, dolores de cabeza y problemas con el pensamiento y la memoria, que a veces
son llamados "lagunas mentales". Estos síntomas fluctúan y no necesariamente ocurren simultáneamente.
El examen clínico puede mostrar una discreta inflamación de algunas entesis (unión músculo y hueso), pero se comprueba la integridad de las articulaciones y un estado general normal. Lo único significativo es una
respuesta dolorosa a la palpación de algunos puntos musculares y tendinosos específicos que, si son en un alto número (de 14 a 22, pero éste número varía según los autores), vienen a confirmar la existencia de la
Fibromialgia y su diagnóstico.
Los exámenes complementarios son negativos. VSG y PCR normales, así como las radiografías de las articulaciones. Incluso las biopsias de los músculos y tendones sólo evidencian anomalías inconstantes, menores y
no específicas.
Oficialmente, no se conoce con certeza factores predisponentes, si bien parece ser que las situaciones continuadas de estrés, el sueño deficiente, alguna posible afección reumática y diversos factores ambientales pueden tener
un papel importante en las causas de su aparición. El componente genético también se considera, pero no es una enfermedad hereditaria.
La Fibromialgia puede ser difícil de tratar y suele tener mejores resultados si se maneja por médicos de varias disciplinas. Para proporcionar alivio del dolor se suele prescribir AINEs, principalmente los
selectivos inhibidores de la COX-2 (Coxib). Para ayudar al sueño suelen usarse los antidepresivos tricíclicos, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y duales. En ocasiones se suele recetar un
fármaco llamado Ciclobenzaprina, clasificado como relajante muscular y similar a los antidepresivos tricíclicos. Actualmente se realizan estudios y ensayos para la utilización de varios fármacos o terapias
tendentes a mejorar la calidad de vida de los afectados de FM.
El Régimen Ancestral
Teniendo en cuenta que la Fibromialgia es una patología reumatológica, que resulta del ensuciamiento de los músculos, los tendones y las neuronas por residuos bacterianos y alimentarios de origen intestinal, el
seguimiento del Régimen Ancestral puede llevar a cabo una remisión total de la misma. La mejoría comienza en las primeras semanas y se completa en unos pocos meses.